Había un mundo perdido en Orión, que los terrícolas no conocían.Estaba lleno de violetas, amapolas, lirios y todo tipo de flores. No había gastronomía porque nadie necesitaba comer. Ni mesas, ni sillas, porque nadie necesitaba sentarse, todos volaban.
Lo único malo es que aquellas gentes se sentían muy libres y dejaban volar sus pensamientos y energías, y eran tan potentes que llegaban a todo el Universo. En la Tierra la gente, agotada por el estrés del trabajo y las rutinas diarias, les agobiaban mucho esas voces extrañas que no podían comprender, ya que pensaban que tampoco les quedaba mucho tiempo en comprender. Sólo una parte muy pequeña de la Tierra se paraba a escuchar y les gustaba oír.
Políticos gobernantes de muchos países decidieron construír un potente misil que acabaran con esas gentes extrañas de Orión y así poder vivir tranquilos. La gente de Orión presintieron esa amenaza y no sabían qué hacer. De momento intentaron no sentirse tan libres ni felices porque pensaron que les tenían envidia y se reunieron en silencio pensando en qué hacer. Poco a poco dejaron de volar, de pensar y se les fue olvidando. Y así fueron notando que tenían hambre y ganas de sentarse, pero no tenían sillas, ni comida.
3 Comments:
Es de dibujos animados :E
Siempre nos quedará Orion.
pero e un poco triste .... no?
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