HERIDAS ACECHAN A UN GRANO DE SAL
mi cara se antepone a mi ceguera
miles incontables objetos tono llorado
inventa liturgia onírica lisergia
se derrama en el (eco del) tiempo
no escuchado por demasiadas palabras
armadas contra mi pensamiento
en un fondo de mañana gris
y noche iluminada por euforias
que de la nada estallan al infinito
bello es gritar y sin querer el contagio
algo tan vivo tan sin querer
que se mezcla por sí mismo
sin tocarlo sin niebla danzante
y el chispazo en el (eco del) tiempo
el fondo es ignorado
y acogido por los sueños
y una cárcel te sonríe
le romperías con la lengua
los tabús tan ligeritos de ropa
es laberinto de ya no tan hoy
las palabras invocan y tu fotografía da sueño
ojos parpadean desde muy lejos
su viento me acaricia la mejilla
y me sacude el mar del pecho
una lágrima se escapa
va recorriendo un falso olvido
hasta tropezarse y evaporarse
y hacerse nube
y vuela y me tiende la mano
me lo pienso
no hay tiempo
me coge por las pestañas
salgo con ella volando de la tierra
y veo las barcas en la orilla
donde estaría tan bien
echado sin pensar
soñando
o persiguiendo cangrejos río arriba
extraño en la pulpa de lo extraño
que protege lo puro y lo devora
suave como olas de buen olvido
van y vienen las sensaciones
antes sentidas y crédulamente nuevas
lámparas eternas
a las que nunca nadie ha pasado un trapo
y nunca se ven sucias porque hay un simbiótico insecto
que lame sus llantos de polvo
a cambio de creerlas con vida
Roberto Tábano 2006
3 Comments:
extraño en la pupa del extraño
bello es hacerse nube persiguiendo cangrejos
nunca nadie ha pasado sin pensar me lo pienso sin tocarlo
un fondo escuchado por mi cara
bravo caracolito
caracolito pupa
hacerse nube Anaconda
escuchado por mi
pensar me lo pienso
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